VUCA son las iniciales de las palabras: volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad. En inglés: volatility, uncertainty, complexity, ambiguity. El término es muy conocido en el mundo empresarial. Se aplica a las empresas y a la sociedad, describe el mundo incierto, complejo, volátil y ambiguo.
No es una metodología para aplicar soluciones, es para describir, comprender y para tomar medidas en el entorno de incertidumbre que vivimos, por ejemplo, en la pandemia, la postpandemia, el cambio climático y los efectos que tenemos y veremos a futuro con las dos guerras, la de Israel-Hamás y Rusia contra Ucrania.
Revisemos la historia: En Grecia tenían una filosofía, separar la emoción de la razón y para tal fin crearon la Escuela que le llamaron “estoicismo” fundada por Zenón. El objetivo era el dominio a partir de la razón de los hechos que perturbaban la vida de las personas. Imaginaban las emociones en dos vertientes: las destructivas o disruptivas como el coraje y el rencor; estaban conscientes que estas impiden el disfrute de la vida y la creatividad. Y las constructivas: el amor, la alegría y el sentido de la justicia.
Con la máxima “No te preocupes, ocúpate” hoy en día la inteligencia se mide por la capacidad de adaptación a los cambios vertiginosos que vivimos.
Los elementos de VUCA:
*Volatilidad, altos niveles de inestabilidad y cambio, describe la velocidad de los cambios. Los mercados son volátiles, de un momento a otro las empresas pueden perder sus ganancias por la volatilidad del dólar, la competencia, los monopolios y la inflación. Son tiempos de riesgo que desafían la necesidad de control. En la parte positiva pueden crear oportunidades de innovación.
*Incertidumbre. La incertidumbre se refiere a los acontecimientos en los que no tenemos suficiente información para predecir su resultado. En entornos inciertos, no podemos hacer planes adecuados para alcanzar los objetivos. La pandemia, la guerra, el cambio climático nos mantienen en incertidumbre. El temor de que la guerra se extiende y mantiene a los países en la incertidumbre. Hace años no se había visto que el dólar estuviera a un nivel tan bajo, pero no a todos beneficia. En la pandemia el miedo se encargó de que se extendiera la psicosis social, por ansiedad fallecieron muchas personas sobre todo adultos mayores, la población se apresuró a vacunarse y hoy vemos que las vacunas tienen efectos secundarios.
*Complejidad. Los sistemas complejos están interconectados, una variable en la economía en los países capitalistas afecta a los emergente y sucede el efecto dominó.
Es importante la sabiduría de los griegos: “la incertidumbre como oportunidad y adaptarse a los cambios”. Y la de los chinos: “La crisis es un momento de oportunidad, crisis: crecimiento” Cuando los sistemas complejos, rígidos se presionan demasiado se destruyen a sí mismos.
*Ambigüedad. Consiste en interpretar una situación de forma incompleta, difusa o contradictoria. Se necesita un alto nivel de conciencia, creatividad, capacidad de observación y reflexión para identificar las formas de interpretación. El contexto juega un papel importante en la ambigüedad.
Para qué las empresas, los grupos se preparen a los cambios es necesario analizar los perfiles de sus colaboradores: que estén adaptados a trabajar bajo presión, que sean creativos, innovadores, con variedad de conocimientos de las nuevas tecnologías y muy importante seguridad en sí mismos.
Los cambios implican ansiedad anticipatoria, es decir el cambio significa estrés. El estrés es un proceso de cambio y adaptación, lo que significa un desgaste que afecta el sistema de defensas y para estar preparados son necesarios hábitos saludables: alimentación nutritiva, dormir unas 7, 8 horas, horas de descanso placentero y recreación.
Desde la globalización, el mundo está muy revolucionado, es necesario una actitud mental ante el caos. Me hizo recordar lo que dijo Mafalda “paren al mundo que me quiero bajar”
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