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-Interesante síntesis histórica del manejo oficial

-Urgen soluciones prácticas inmediatas al problema

-La autoridad federal acusa a “los conservadores”

R Á F A G A

(El viernes comienza Marzo y da principio la campaña de dos mujeres que buscan ser Presidenta de México. Deseo que nos presenten un Programa de Soluciones a la Problemática Nacional. Discursos floridos y ataques personales, no quiero oírlos. Ambas tendrán un supuesto competidor).

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CULPABLES… ¡“LOS CONSERVADORES”!

Cada día aumenta el problema del abastecimiento de agua para consumo humano en la Ciudad de México, en los municipios mexiquenses conurbados, en Toluca y en muchas de las ciudades capitales de los Estados de la República.

En el medio oficial ni sudan ni se acongojan y culpan a “los conservadores” que están contra el inquilino de Palacio Nacional. Para el tabasqueño lo que sobra es agua, sí… ¡allá en Tabasco!

Estamos ante una situación que data de hace más de cincuenta años y de la cual los antecedentes seguramente son desconocidos. Allá por 1956 el reportero Abel Tirado López hizo una serie noticiosa, en las páginas del diario Zócalo, al entrevistar a “El Hombre que hacía llover”, un técnico hidráulico.

En la primera quincena de diciembre de 1976, durante una semana, el diario La Prensa publicó reportajes del suministro de agua en la frontera Norte y en el Distrito Federal. El ingeniero Joel Hernández dio a conocer un método para la localización de pozos de agua potable. El ingeniero Emilio López Zamora publicó un estudio muy completo sobre el problema de la salinización del agua y su transformación en agua potable.

Hace 20 años Francisco Martín Moreno escribió el libro “México Sediento”, aportando valiosa información basada en investigaciones, datos y testimonios, pronosticando un desastre por la falta del preciado líquido. Apuntó que se reduciría la producción de energía eléctrica. Tendría la Ciudad epidemia sanitaria por la acumulación de excremento humano y el callejero de los perros.

En este 2024 los mexicanos enfrentamos un problema que carece de planeación y realización de infraestructura, creación de nuevas obras hidráulicas, así como el mantenimiento permanente de los sistemas conductores para llevar el agua a los hogares, a los elevados edificios, a las torres de oficinas y departamentos habitables, hospitales e instalaciones urbanas.

SOLUCIONES INTEGRALES, ¡YA!

Hasta este día no se conoce un plan concreto, un programa de acción inmediata, un proyecto de soluciones al ya próximo e inminente temporal de sequía. El abastecimiento de agua a los hogares, no parece importarle a los gobiernos federal, estatales y municipales.

La solución no está en enviar “pipas” a las colonias, a los barrios, a los suburbios. “Los piperos” privados, los comerciantes del agua, han elevado el costo del servicio. Triplican la tarifa de 200 pesos y nadie lo impide, los consumidores tienen que pagarla.

Hemos oído y leído que tanto en Palacio Nacional como en las oficinas del gobierno capitalino, minimizan el problema y culpan a los conservadores, porque es una maniobra para atacar al sexenio cuatroteísta. A esa línea se sumó la candidata presidencial del Presidente de México. Del lado de la llamada oposición, nada pueden hacer y lo que digan queda en eso, en palabras.

En comentario periodístico, hace ocho días, abordé  el tema. Durante este sexenio a la Comisión Nacional del Agua, organismo “encargado de preservar las aguas nacionales, así como garantizar la seguridad hidráulica de México”. Asimismo corresponde a la CONAGUA “administrar, regular, controlar y proteger las aguas nacionales”.

En la teoría suena bien todo eso. La CONAGUA en estos últimos cinco y medio años ha tenido una directora, ingeniera ambientalista, que fue premiada con ser Embajadora en Francia. Desde el 31 de mayo de 2021 el director general es el ingeniero civil Germán Arturo Martínez Sánchez, con carrera burocrática dentro de la institución. El apoyo presupuestal está por los suelos, por órdenes del tabasqueño y nada puede realizarse para cumplir con tan importante misión.

LO HIDRÁULICO, NO ES PÓLÍTICO

Los políticos visionarios del Siglo XX, a partir del final de la década 1920, entendieron la necesidad de construir presas almacenadoras de agua y la primera fue construida de 1927 a 1929, en San José de Gracia, Aguascalientes.

Una obra de grandes dimensiones para su época que elevó la economía de esa entidad en frutales, viñedos, verduras y ganadería. El promotor, el presidente Plutarco Elías Calles.

El presidente Miguel Alemán Valdés transformó la Comisión Nacional de Irrigación en Secretaría de Recursos Hidráulicos, SRH, impulsora de la producción agropecuaria, mediante una bien planificada etapa sexenal a cargo del ingeniero Adolfo Orive de Alba.

Durante el sexenio de don Adolfo Ruiz Cortines, uno de los principales problemas en materia hidráulica fue el Lago de Chapala, el más grande de México. Se requería limpiarlo del lirio acuático; darle mantenimiento tanto del lado de Jalisco como de Michoacán.

Don José Guadalupe Zuno Hernández encabezó un movimiento, demandando al gobierno por un mejor servicio al lago, que derivó en la renuncia del titular de Recursos Hidráulicos, el ingeniero Eduardo Chávez.

Sería en el gobierno del presidente Luis Echeverría Álvarez cuando el campo recibió una fuerte inyección al darse, con un programa técnico, ampliación y mantenimiento a los Distritos de Riego. Más de cinco millones de hectáreas resultaron beneficiadas, conservando el País un sitio preponderante en la producción alimentaria.

El ingeniero Leandro Rovirosa Wade como titular de la SRH, apoyado por un grupo de ingenieros especializados en materia hidráulica, puso en marcha programas de soluciones integrales tanto para presas, ríos, arroyuelos y procuró ordenar el mantener limpias las aguas del Puerto de Acapulco, en beneficio del turismo.

Fue el último sexenio en que hubo atención al problema que hoy nos aqueja. Nunca olvido la frase del ingeniero Rovirosa Wade, dicha al presidente Echeverría, “las obras hidráulicas, no son políticas”.

Dios da el agua, pero no la entuba.

jherrerav@live.com.mx