Ruanda prepara un duro circuito con 5 mil metros de desnivel para el Mundial de Ciclismo en Ruta que acogerá África por primera vez en 125 años de historia, informó en Londres el presidente de la Federación de Ciclismo del país centroafricano, Samson Ndayishimiye.

“Ruanda ha sido un país muy afortunado, ya que cuenta con todo lo que el ciclismo y los ciclistas necesitan como deporte”, aseguró Ndayishimiye en un encuentro con periodistas en la embajada del país en la capital británica, en el que señaló que este deporte siempre ha formado parte de la cultura y vida cotidiana de los ruandeses.

La prueba, que se celebrará entre el 21 y el 28 de septiembre en la capital, Kigali, espera contar con las grandes figuras del ciclismo actual, como el esloveno Tadej Pogačar, en un enclave que tendrá más desnivel que la edición anterior, que tuvo lugar en la ciudad suiza de Zúrich.

“La prueba más difícil, en Zúrich, tenía unos 4 mil metros de desnivel. En Ruanda, se ganan mil metros más, alrededor de 5 mil metros de desnivel”, explicó Ndayishimiye.

En términos de infraestructura, el país está “donde debe estar en términos de organización”, ya que, según los organizadores, la capital cuenta con una red de carreteras apta para este tipo de eventos, para el que se espera “entre 4 mil y 7 mil visitantes internacionales”.

Entre otras novedades, el presidente de la Federación de Ciclismo de Ruanda señaló que la prueba contrarreloj individual se iniciará por primera vez dentro de un estadio, el BK Arena, en el que se suelen celebrar partidos de baloncesto y que cuenta con una capacidad para 10 mil personas.

Seguridad e inversiones

Con el Mundial de Ciclismo en Ruta, Ruanda busca además ampliar su influencia en el continente africano como receptor de inversiones, que ya gestiona con patrocinadores internacionales como el grupo francés TotalEnergies, con el que firmaron un acuerdo “hace unas semanas”.

“Como comité organizador local, no solo nos centramos en dar la bienvenida a estas personas para que vean la carrera de 8 días, sino también en animar a la gente a visitar Ruanda tal y como es, a ir a ver a los gorilas, por ejemplo”, aseguró Johnston Busingye, alto comisionado de Ruanda para el Reino Unido.

El alcance tanto del campeonato como de la imagen de Ruanda como país capaz de gestionar eventos de esta magnitud está estimado, según los organizadores, en 300 millones de personas, gracias a las 140 retransmisiones televisivas que esperan.

La seguridad es uno de los factores cruciales para la celebración de este evento, para el que la Unión Europea llegó a pedir un cambio de enclave -al que la Unión Ciclista Internacional (UCI) se negó-, debido a las tensiones existentes entre Ruanda y la República Democrática del Congo (RDC).

Ambos países mantienen desde hace semanas negociaciones para tratar de alcanzar una salida pacífica al conflicto en el este congoleño, donde el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), que cuenta con el apoyo de Kigali, intensificó a principios de este año su ofensiva al tomar las capitales de las provincias de Kivu del Norte y la vecina Kivu del Sur.

“Durante 31 años, nuestro país, de una frontera a otra, se ha asegurado de que sea seguro, porque la seguridad es una de las cosas que necesitamos para impulsar la inversión y el turismo”, explicó Busingye.

Así, las medidas de seguridad para los ciclistas, explicó Ndayishimiye, serán las mismas que tiene cualquier otra ciudad que haya celebrado campeonatos de este tipo.

Autor
EFE