La policía de Merseysida está investigando el incidente racista que un aficionado del Liverpool tuvo con Antoine Semenyo, delantero del Bournemouth, durante el partido de Premier League disputado entre estos dos equipos el viernes.

Semenyo se disponía a sacar de banda cuando fue insultado por un aficionado en silla de ruedas que fue localizado en las primeras filas de las gradas y sacado posteriormente del estadio. Taylor detuvo el partido y se fue hacia los banquillos para hablar con ambos entrenadores, Arne Slot, del Liverpool y el español Andoni Iraola, del Bournemouth.

Explicó la situación y, tras unos minutos de interrupción, el partido se reanudó. La Premier, esta temporada, cuenta con un protocolo antiracismo que fue aplicado por el árbitro en este encuentro de apertura del torneo. El árbitro informa a los técnicos y si la situación se repite, el choque se suspenderá durante quince minutos.

El encuentro continuó con normalidad, pero después del partido, Slot consoló a Semenyo e Iraola dijo que era «una vergüenza» que algo así ocurriese.

«Es algo inaceptable, especialmente en Anfield», agregó Slot.

Mediante las redes sociales, Semenyo condenó lo ocurrido y dio las gracias a quienes le habían apoyado.

«La pasada noche en Anfield se quedará conmigo para siempre, no por las palabras de una persona, sino por cómo toda la familia del fútbol se unió. A mis compañeros del Bournemouth, que me apoyaron en ese momento, a los jugadores del Liverpool y aficionados que me mostraron su verdadero carácter y los árbitros de la Premier que lidiaron con ello de una forma tan profesional, gracias. El fútbol mostró su mejor cara cuando más importaba. Marcar dos goles se sintió como hablar el lenguaje que importa de verdad en el campo. Esto es por lo que juego, por momento como este», dijo el ghanés.

En un comunicado, el Liverpool aseguró estar al tanto del insulto racista, lo condenaron y añadieron que no pueden contar nada más, ya que el asunto está bajo investigación policial.

Con información y foto de: EFE