El técnico mexicano Miguel Piojo Herrera no solo llega a la semana con entrenamientos y convocatorias, sino también con un cúmulo de críticas, presión mediática y expectativas altas sobre su proyecto al frente de la Selección Nacional de Costa Rica.
Según ESPN, tras una reunión de evaluación con dirigentes de la FCRF, el técnico entendió que su margen de error es mínimo, y eso se reflejó directamente en la lista de convocados para los próximos compromisos eliminatorios.
Entre las decisiones más comentadas estuvo la exclusión de Brandon Aguilera, Ariel Lassiter y Anthony Contreras, ausencias que muchos interpretaron como una respuesta directa al malestar de la afición por el bajo rendimiento colectivo en las fechas anteriores.
A pesar de las críticas, Herrera no actuó con tibieza: reactivó el regreso de Celso Borges, uno de los líderes históricos del equipo, y volvió a confiar en jugadores como Kendall Waston, Allan Cruz y Álvaro Zamora, recortando a quienes no lograron convencerlo en sus últimas apariciones.
Herrera dejó claro que la inclusión de Borges no es solo simbólica. En palabras citadas por ESPN, el técnico explicó:
“Me faltaba el manejo del juego, alguien que pese más que los jóvenes… ahora necesito un tipo que me empuje y nos maneje a estos jóvenes en la media cancha.”
Con esto, Celso Borges se convierte en una pieza clave para aportar liderazgo y orden táctico en una selección que necesita resultados inmediatos.
Costa Rica enfrentará a Honduras en San Pedro Sula, un duelo crucial en el Grupo C de la eliminatoria rumbo al Mundial de 2026. Los ticos llegan con solo 2 puntos, mientras que Honduras suma 4, con 2 partidos por jugarse.
Un tropiezo como visitante podría ser prácticamente definitivo, por lo que el margen para especular es nulo. El siguiente compromiso será el próximo martes, cuando la Tricolor reciba a Nicaragua en el Estadio Nacional.
Herrera sabe que el peso de los resultados marcará su futuro. Esta semana, más que nunca, será un parteaguas en su proyecto.
Con información de ESPN