En su primer Grito de Independencia como presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo marcó un momento histórico no solo por ser la primera mujer en encabezar esta ceremonia, sino por incluir en sus arengas a heroínas que durante décadas fueron invisibilizadas en los relatos oficiales.
Durante su conferencia matutina desde Palacio Nacional, la mandataria mexicana reflexionó sobre el papel de las mujeres en la historia nacional y la necesidad de reconocerlas públicamente.
“Cuando yo estudié en la primaria, solo se mencionaba a Josefa Ortiz de Domínguez. Parecía que solo había habido héroes, y no mujeres que hubieran tenido un papel importante en las gestas históricas. Era una visión muy masculina, muy machista de la historia”, dijo.
La mandataria explicó que su decisión de incluir a figuras como Gertrudis Bocanegra, Leona Vicario y Manuela Molina “La Capitana” en la ceremonia del Grito responde a un compromiso con la memoria histórica y con las niñas mexicanas que merecen verse reflejadas en quienes también lucharon por la patria.
Heroínas que merecen ser nombradas
Sheinbaum destacó el valor de mujeres como Gertrudis Bocanegra, quien fue fusilada en Pátzcuaro tras negarse a delatar a los insurgentes, y de Leona Vicario, reconocida como la primera periodista mexicana. También mencionó a Manuela Molina, una mujer indígena que trabajaba como empleada del hogar y que decidió unirse al movimiento independentista, llegando a ser nombrada capitana por José María Morelos.
“Reconocer a las heroínas es fundamental para que las niñas sepan que también han tenido un papel histórico. No solo los hombres construyeron México.”
Cabe destacar que, durante la ceremonia en Palacio Nacional, Sheinbaum lanzó 22 vivas, entre ellos: “¡Viva Gertrudis Bocanegra!”, “¡Viva Leona Vicario!”, “¡Viva Manuela Molina, La Capitana!”, “¡Vivan las heroínas anónimas!” y “¡Vivan las mujeres indígenas!”.