Por: Hugo Salinas Price
plata@plata.com.mx
Desde hace más de 20 años, hemos estado insistiendo que a México le conviene aprovechar su enorme riqueza mineral de plata para el gran beneficio de los mexicanos, al utilizarla de nuevo, como dinero.
Durante siglos, se enriqueció fabulosamente México, al ser el principal proveedor mundial de dinero de plata, que tomó la forma de la famosa pieza de «Ocho Reales», que circuló en el mundo entero.
México sigue siendo el principal proveedor de plata en el mundo, con una producción anual que ronda 196 millones de onzas.
Antiguamente, se hacía público el valor oficial de la moneda de plata, al grabar su valor en la moneda. Como ejemplo, los 12 gramos de plata en el «Peso 0.720», moneda que circuló en México desde 1920 hasta 1945, llevaban la leyenda: «Un Peso». En vista de que hoy en día los precios de los metales preciosos varían en términos de pesos, ya no se graba un valor fijo al dinero de plata; sin embargo, sí es posible otorgarle un valor monetario a la onza «Libertad», de plata pura, por medio de una cotización monetaria de parte de Banco de México, la entidad oficial que provee a México de dinero.
Proponemos que la cotización del valor monetario de la onza «Libertad», emitida por Banxico, pueda alterarse al alza, de acuerdo con alzas en el valor de la plata que contiene, pero nunca a la baja – tal y como sucedía con el famoso «Peso 0.720», que valía «Un Peso» cuando los 12 gramos que contenía valían 51 centavos, y siguió valiendo «Un Peso» cuando el precio de la plata que contenía el «Peso 0.720» había caído a 31 centavos.
Al eliminar un valor monetario grabado, y sustituirlo por una cotización oficial flexible, la onza «Libertad» y sus fracciones seguirían siendo dinero en forma permanente; gozarían de valor monetario superior, al subir el valor de la plata en lingote, pero permanecerían sin cambio, si la plata bajara de precio.
Un programa de monetización de la plata modesto, bastaría para elevar el precio de la plata en los mercados mundiales, para beneficio de la minería mexicana, y para los ahorradores mexicanos, que en lugar de buscar su protección financiera en la posesión de dólares, serían compradores de onzas «Libertad» monetizadas.
Barrunta en el mundo, un colapso del sistema financiero mundial, en cuyo caso, la monetización de toda la producción de plata de México, será la salvación del pueblo mexicano. El peligro de tal colapso mundial aumenta día con día. Idealmente, para cuando se presente ese colapso, ya se habrá realizado la monetización de la Onza «Libertad» y sus fracciones.
La monetización de la Onza «Libertad» ha enfrentado la tenaz oposición de Banxico, que no ha percibido el hecho de que la monetización de la plata proporciona un instrumento adicional de control de la inflación para Banxico, porque incentiva el ahorro, que sustrae fondos excedentes de la circulación monetaria, y minimiza la fuga de dólares que siempre teme Banxico.
El temor de Banxico a la «fuga de divisas» se refleja en las altas tasas de interés que impone actualmente; sin embargo, Banxico podría reducir sustancialmente las tasas de interés que hoy frenan a la economía mexicana: al tener los mexicanos la posibilidad de poseer onzas de plata monetizadas, u optar por huir hacia el Dólar, la plata monetizada sería, sin duda alguna, la opción preferida de los mexicanos.
Sobra decir que la plata monetizada será, en efecto, la mejor moneda del mundo. Sin duda, Banxico recibirá peticiones de compra de sus monedas de plata monetizada, de todas partes del mundo. La plata monetizada, se venderá siempre a precios superiores al precio de la plata en lingote.
Por otra parte, los flujos de capital extranjero, deseoso de invertir en México, se incrementarán notablemente, por la confianza en México, país capaz de ejecutar la singular, por no decir gloriosa, medida de crear una moneda real, de plata, con valor monetario establecido por Ley.
De «país en desarrollo», México ascenderá a la categoría de País Desarrollado, muy merecidamente.
(Fuente: http://plata.com.mx/esES/Mas/576?idioma=1)