La lactancia materna no solo protege contra enfermedades y fortalece el sistema inmunológico, sino que también puede impulsar entre un 3 y un 7% el desarrollo neurológico de los bebés que la reciben, por lo menos, 6 meses de forma exclusiva, señaló un especialista.
En una entrevista con EFE, Adalberto Ramón González Astiazarán, neurólogo pediatra del Centro Médico ABC, subrayó que los niños alimentados con seno materno presentan un mejor desempeño en habilidades motoras, cognitivas y de atención tanto en la infancia temprana como en etapas escolares y adultas.
“Los estudios muestran entre un 3% y 7% más de desempeño en pruebas neurológicas en bebés amamantados, incluso cuando se comparan poblaciones con condiciones socioeconómicas y edades maternas similares”, apuntó el experto, en el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna que se conmemora del 1 al 7 de agosto.
González Astiazarán explicó que la leche materna contiene ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga, neurotransmisores y factores hormonales que son esenciales para el desarrollo cerebral, elementos que no se encuentran en la misma proporción en las fórmulas lácteas.
“Podemos dividir a los bebés en 3 grupos: los que son amamantados directamente, los que reciben leche materna extraída, y los que se alimentan con fórmula. El mayor beneficio neurológico se observa en el primer grupo”, explicó.
Más allá de la nutrición, el especialista destacó que la lactancia materna refuerza el vínculo emocional madre-bebé y favorece el desarrollo de la comunicación no verbal, los códigos afectivos y la seguridad emocional desde los primeros meses.
No obstante, reconoció que en México y Latinoamérica persisten múltiples barreras que dificultan una lactancia exclusiva durante los 6 primeros meses de vida, como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Entre ellas, resaltó los factores laborales, socioeconómicos, culturales y de salud materna.
“El lugar de trabajo suele ser uno de los principales obstáculos. Muchas madres no cuentan con espacios adecuados para extraerse la leche ni refrigerarla. Sin estas condiciones, mantener la lactancia exclusiva se vuelve inviable”, advirtió.
El neurólogo también señaló que aún existe desinformación en torno a la lactancia y mitos que afectan la decisión de las mujeres.
“En ocasiones hay rechazo por parte de la pareja o temores sobre el impacto en la imagen corporal de la mujer, lo cual no tiene sustento científico”, agregó.
González Astiazarán hizo un llamado a los sistemas de salud de la región para fortalecer la promoción de la lactancia desde un enfoque integral, basado en evidencia.
“Necesitamos campañas claras, sostenidas, con profesionales capacitados, y sobre todo, brindar el apoyo necesario a las madres para que puedan ejercer este derecho sin obstáculos”, concluyó.
EFE