Hola chicuelos…

¿Ustedes que saben del codiciado elixir? Les comento lo que sé.

Su historia se remonta a   los alquimistas, quienes aseguraban haber encontrado la fuente de la juventud mediante la piedra filosofal. Que no era la tal piedra, sino un procedimiento  que consistía en destilar el agua cientos de veces, hasta convertirla en agua pesada y luego aplicarle fórmulas orgánicas, que ellos llamaban  mágicas.  

Pero el famoso Elíxir nunca llegó a tener los resultados deseados, pero ocasionó la quiebra económica o la muerte de muchos aventureros que dedicaron su vida a buscarlo.

Sobre el mismo tema se rumoró que existía un  paraíso en el Tíbet rodeado de las blancas montañas del Himalaya, donde vivían personas eternamente jóvenes.

Seguramente este lugar, que nadie ha localizado, inspiró al autor de la novela “Horizontes Perdidos” para escribir sobre la apariencia juvenil de los habitantes de Shangrilá.  

Aún así dentro de toda esta fantasía, existen hechos reales y certificados como es el caso de  los centenarios de los Andes. Estos longevos que alcanzan los ciento veinte años viven  concentrados en una ciudad montañosa, a 600 kilómetros de Quito.

Son  indígenas puros, esbeltos, fuertes, de negra cabellera y dientes que envidiarían los actores de Hollywood. Su comida vegetariana, al mismo tiempo es su medicina. A menudo se nutren  de ciertos tubérculos, que podrían ser el secreto de su envidiable vigor. 

Misteriosas y pintorescas leyendas al respecto pueden alejarnos de una realidad en cuanto a conservarnos sanos y felices longevos por lo que volvemos la mirada a los sanadores y médicos tradicionales del Lejano Oriente y  sus consejos  prácticos y efectivos al alcance  de cualquier bolsillo.

El doctor Leu Mu Wang especialista en medicina y farmacología tradicionales, médico residente del “Centro Médico de Hong Kong” ofreció una conferencia sobre longevidad   durante la cual hacía hincapié en lo siguiente:

“No podemos vivir eternamente, pero si sobrepasar los cien años, siempre y cuando  comamos lo adecuado, practicamos gigong, taijiquan y meditación. El tiempo del retiro no sólo depende del cielo: con  un buen mantenimiento personal gozaremos de una larga vida”

El doctor Mu, citó como ejemplo al “ Emperador Amarillo”, autor del primer Tratado de Medicina Tradicional en China, a Lao Tse, autor del Tao Te King,  quién se retiró a las montañas a los 190 años, en perfecto estado de salud y a Li Ching-Yuen,  un viejo feliz que  murió a los 256 años, en el año de 1993, dejando viuda a su vigésima esposa y quién también escribió un Tratado para conservarse sano y con apariencia juvenil

Li Ching-Yuen, al morir tenía  una dentadura perfecta, abundante cabellera no aparentaba más de 50 años. De su tratado sintetizamos  las siguientes recomendaciones:

1-Si se trata de detener la vejez con tratamientos que solo desaparecen síntomas sin actuar en el nivel de las causas, se estará reforzando el proceso de intoxicación.

2- Nunca apresurarse, mantener  el corazón sereno. Sentarse con la tranquilidad de una tortuga, caminar con la viveza de un pájaro y dormir tan profundamente como un perro.

3-Evitar las  emociones externas. El corazón se agota con  los bruscos estallidos de la emoción.

4- Observar un programa diario de ejercicios corporales, respiratorios y, en cuanto a comida: dieta vegetariana y comer poco o nada por las noches de verano y comer un poco más en las mañanas de invierno.

5- El envejecimiento prematuro es solapado por el rencor y la melancolía, tan dañinos como el enojo. Cavaremos nuestra tumba con afectos excesivos, igual  que si vivimos  corriendo de un lado a otro y nos evadimos con cualquier tipo de droga.

6- La necedad obedece a un desequilibrio en la energía del corazón. La cobardía y el miedo reflejan falta de energía en los pulmones o riñones. Remedio: evitar emociones excesivas.

7-No basta dejar café, alcohol, tabaco, necesitamos procurarle buen trato a cada uno de nuestros órganos, glándulas, músculos, sistema nervioso y agradecerles sus funciones, sin  olvidar que los pensamientos afectan la energía vital y que una mente depurada anima la  glándula del Timo a generar  una secreción  similar a la miel, que  constituye la mejor  medicina preventiva.

 8- Por último, la más efectiva recomendación para lograr una longevidad sana con  apariencia juvenil es respetar, amar y solidarizarnos con todos los seres vivos que nos rodean, para  generar AMOR,  el mejor de los elixires de la eterna juventud.

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