En el balcón las amigas miraban ambas como huían las golondrinas
Una pálida sus cabellos negros como el azabache, la otra rubia
Y sonrosada, su vestido ligero, pálido de desgastado amarillo
Vagamente serpenteaban las nubes en el cielo

Y todos los días, ambas con languideces de asfódelos
Mientras que al cielo se le ensamblaba la luna suave y redonda
Saboreaban a grandes bocanadas la emoción profunda
De la tarde y la felicidad triste de los corazones fieles

Tales sus acuciantes brazos, húmedos, sus talles flexibles
Extraña pareja que arranca la piedad de otras parejas
De tal modo en el balcón soñaban las jóvenes mujeres

Tras ellas al fondo de la habitación rica y sombría
Enfática como un trono de melodramas
Y llena de perfumes la cama vencida se abría entre las sombras

* Paul Marie Verlaine (Metz, 1844 – París, 1896), poeta francés, representante del simbolismo al que se llamó Príncipe de los Poetas. En 1866 publicó su primer libro, Poemas saturnianos, que revela la influencia de Charles Baudelaire, al que siguieron Fiestas galantes (1869), en el que describe un universo irreal a lo Watteau, y La buena canción (1870). También destacan algunas obras poéticas de tema religioso como Amor, 1888; Liturgias íntimas, 1892 y de tema erótico Paralelamente, 1889; Mujeres, 1890; Canciones para ella, 1891; Odas en su honor, 1893; Elegías, 1893; En los limbos, 1894.

“Balcón florido”. Pintura. Óleo sobre Tabla. (2007)

FUENTE: AGENCIAS

CANDELERO, 09-01-2021