-La madrugada del lunes 3, en Palacio Nacional el Ejército y la Armada tendrán Comandanta.
-La reacción del tabasqueño, sin su Mañanera.
Por Jorge Herrera Valenzuela
Alfa-Omega
(Dentro de ocho días definiremos el futuro de nuestro hermoso País.
Acudiremos a depositar el Voto por la que será la primera Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos y por la Integración de un Congreso de la Unión Autónomo.
Deseamos vivir sin violencia. Anhelamos disminuir las acciones delincuenciales. Queremos un Gobierno Democrático. Pedimos Programas para la Salud, la Educación y la Vivienda).
¿SE AVECINAN NUEVOS AIRES?
Desde hace semanas reina el nerviosismo en el despacho presidencial.
Circulan las versiones más contradictorias en torno a los resultados de la votación.
No puede afirmarse que el Presidente de México, único destapador de las candidatas a sucederlo, esté tranquilo y seguro de que el triunfo para él, será arrollador, aunque no de la proporción del que obtuvo hace seis años.
Lo único cierto, en esta semana 22 del 2024, es que soplarán nuevos aires, cambiará el ambiente y se esparcirá el perfume de mujer por los pasillos de Palacio Nacional.
El inquilino del edificio colonial no se detiene un segundo del día para movilizar a miles de “servidores de la Nación”.
La orden es ir casa por casa, invitando a sus moradores para que voten por los candidatos oficiales.
Dicen que hay ofrecimiento de estímulo económico y amenaza de quitar la pensión bimestral. Esto es falso porque es un Derecho Constitucional. Lo de la compra de votos, requiere pruebas de ello.
El domingo 2, será la primera ocasión que, en la sede del Poder Ejecutivo Federal, se concentren los Gabinetes, Legal y Ampliado; los legisladores federales y estatales; los 23 gobernadores del MRN (Movimiento de Regeneración Nacional), los Alcaldes capitalinos y los empleados, amigos y simpatizantes del régimen.
¿Cómo se vivirá la madrugada del lunes 3 de junio en Palacio Nacional?
Habrá de prepararse toda la logística, desde días antes y tener el sábado 1, Día de la Marina, listo, al cien por ciento, el trabajo en los 31 Estados, la Ciudad de México con sus 16 Alcaldías y las presidencias municipales, principalmente las de Ciudades Capitales.
Desde las ocho de la mañana el ambiente tenso. Gritos. Órdenes de todo tipo. Los celulares en acción, ya no se escuchará el repiquetéo de los teléfonos fijos, como antes. Nadie estará quieto, ni en un solo lugar. Desayuno calientito. Café. Jugos. Atole. Tamales.
A lo mejor llaman al director general de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett Díaz, por su experiencia en la operación de comicios electorales y manejo del sistema.
En el curso del domingo 2 –día de mi cumpleaños 87—se sabrá si la delincuencia organizada impidió la instalación de casillas, pues la violencia está presente en Chiapas, Tabasco, Guerrero, Zacatecas, Morelos y Michoacán, por no alargar la lista.
La orden de cerrar las casillas electorales, es a partir de las seis de la tarde, siempre y cuando no haya votantes.
Seguirá el recuento. Tarea muy detallada e importante, durante varias horas porque, por ejemplo, en la Ciudad de México habrá urna para el voto presidencial, otra para Jefe de Gobierno, una más Alcaldes, la cuarta de Diputados Locales, la siguiente Diputados Federales, la seis para Senadores y las de los 204 concejales.
Trámite muy importante, indispensable y el más valioso jurídicamente, el Acta de Escrutinio, la que contiene número votos válidos, los anulados y los nombres anotados en las boletas electorales. La Firma de los directivos de la Casilla, los representantes de los partidos participantes y los que se acreditaron en nombre de los candidatos.
MADRUGADA DE INCERTIDUMBRE
Acostumbró mi compadre Manuel Buendía repetir, “Mal empieza la semana, al que ahorcan en lunes”.
A cuántos de los miles de candidatos se le podrán aplicar esas palabras. La noche anterior habrá resultados de las votaciones federales, estatales y municipales, pero serán parciales y a condición de ser confirmados.
Instalado el Comité Técnico Asesor del Conteo Rápido, sus integrantes, debidamente capacitados, cumplirán con su función, la cual contará con candados y evitarán las filtraciones de datos para dar la información oficial.
Quienes hoy cantan victoria y quien ha declarado que la votación “es un mero trámite”, tal vez cierren sus boquitas o cuenten con el triunfo que les glorificará por seis años.
La incertidumbre durará hasta la misma madrugada de lunes, martes, miércoles.
El “destapador”, director, coordinador y único mando del proceso político electoral, YSQ, necesitará toda clase de calmantes, sedantes, tranquilizadores y hasta “unos chiqueadores de ruda” en las sienes. Don Jesús Reyes Heroles recomendaba, a los desesperados por un resultado, tomar tragos de Pasiflorine.
La pregunta que se oye, a nivel nacional, es ¿el presidente reconocerá la o las derrotas que sufran sus candidatas y candidatos?
Hasta ahora ha demostrado el inquilino de Palacio Nacional que la única “autoridad política y autoridad moral es él”.
Ninguneó desde hace meses al Instituto Nacional Electoral, buscó tener bajo su control al Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial.
Mantiene anulada, marginada, a la segunda titular de Gobernación del sexenio; ahí estuvo su hermano, amigo, compadre y paisano que anda en un pos de ser de colaborador de la candidata oficial.
Bueno, la realidad es que, conocido el resultado oficial respecto a la votación obtenida por las dos candidatas presidenciales, una de ellas de hecho será el nuevo mando nacional. El poder absoluto llegará al ser declarada, por el Tribunal Electoral, Presidenta Electa de los Estados Unidos Mexicanos.
SE ACABAN PODER Y APLAUSOS
En México y en todo el mundo, el cambio de titular de la Presidencia, la designación de un nuevo Primer Ministro y el ascenso al trono de un Rey o una Reyna, implica, por simple lógica, nuevas reglas del juego.
Quien entrega el poder, voluntariamente o no, deja de dar órdenes, se acabaron las caravanas y los aplausos, lo siguen sus cercanos colaboradores, sus verdaderos y auténticos amigos.
Hubo casos en que hasta los familiares se retiraron del personaje. Ya no se le abren todas las puertas y no se oirá más el “sí, señor”.
Pocos de nuestros presidentes se prepararon para vivir una nueva etapa, la que antepone un ex al cargo que desempeñaron. De inmediato se rompe la rutina.
López Mateos y López Portillo terminaron divorciados de sus respectivas esposas y contrajeron segundas nupcias.
Las nuevas viudas tuvieron muchos problemas judiciales con los herederos de los expresidentes. Angelina y sus dos hijos jamás tuvieron acceso al hospital donde estaba López Mateos y doña Eva fue declarada única viuda.
El abogado Alemán Valdés sintió mucho dejar la presidencia. Rejuveneció al ser llamado nuevamente “señor presidente”, esto al ejercer como presidente del Consejo Nacional de Turismo. El economista Ernesto Zedillo no perdió tiempo y marchó a Estados Unidos donde lo contrataron como alto ejecutivo empresarial.
Retomo el comentario sobre el primer día sin poder, sin aplausos, sin “amigos”. Recomiendo busquen el libro que sobre este tema escribió el gran Luis Spota.
El presidente Díaz Ordaz anticipó sus días fuera del despacho más importante de México y se declaró “el solitario de Palacio”.
El doctor Gustavo Baz la noche del 15 de septiembre de 1958 al entregar el mando al sucesor, Juan Fernández Albarrán, dijo: “nos vamos los feos, los incapaces y los rateros; llegan los bonitos, los capaces y los honrados”. Fue en la cena, cambio de gobernador, en Toluca; el doctor Baz estaba solo con su esposa y familiares y al gobernador entrante no lo dejaban de abrazar.
¡EL REY HA MUERTO!
La doble pregunta obligada:
¿Cómo va a reaccionar el tabasqueño, la misma noche del 30 de septiembre y cómo soportará la mañana del lunes 3 de junio?
Los mexicanos tendremos a la Primera Presidenta de la República, la Primera Comandanta Suprema de las Fuerzas Armadas. ¿Habrá primer esposo?
El hombre que “gobernó” implantando sus programas televisivos, “La Mañanera”, ya no tendrá cámaras y micrófono. Dejará de asistir a sus reuniones madrugadoras con el llamado Gabinete de Seguridad. Se acabaron los días de hacer campaña política, iniciada al principio de este Siglo XXI.
Quedará el recuerdo de que fue el presidente que vivió, seis años, en Palacio Nacional. El departamento lo heredó del presidente que más atacó, Felipe de Jesús Calderón Hinojosa.
Poco o casi nunca se abrió la Puerta de Honor de Palacio Nacional, el acceso únicamente para el Jefe del Ejecutivo Federal y distinguidos visitantes extranjeros.
Hemos oído reiteradamente que el hoy presidente se retirará de la política, que se irá a su modernizado rancho con nombre muy especial, que dedicará su tiempo a escribir libros, que por ahora suman 20 y le dan regalías “para vivir bien”.
Bueno, poco ha de vivir el que no sepa cómo reaccionará un hombre que logró recibir más de 30 millones de votos para ejercer como Presidente de México. Poder político que desperdició y del que perdió una buena proporción.
Finalmente, me pregunto: ¿Algún día viajará, como turista, a los Estados Unidos de América?
¡PRESIDENTA!… ¡PRESIDENTA!
El martes 1 de octubre todo tendrá una nueva directriz política y administrativa.
El Congreso de la Unión cumplirá un mes en funciones.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación continuará bajo la presidencia de la ministra Norma Lucía Piña Hernández.
Conoceremos los nombres de las mujeres y de los hombres que formarán parte del Gabinete Legal y de quienes integrarán el llamado Gabinete Ampliado. Los funcionarios claves en la Presidencia de la República, desde el secretario particular.
No puedo dejar de comentar que, precisamente, en octubre celebraremos el Bicentenario de los Estados Unidos Mexicanos y la toma de posesión del primer presidente electo.
La Constitución promulgada el 4 de octubre de 1824 y la asunción el día 10, de ese mismo mes y año, de Guadalupe Victoria.
Bien, la noche del próximo histórico domingo 2 de junio nos informará, la presidenta del Instituto Nacional Electoral, de los primeros resultados de las votaciones y conoceremos el nombre de la candidata presidencial triunfadora.
Los ambientes serán los naturales.
Alegría, abrazos, gritos de ¡Presidenta!… IPresidenta!… ¡Presidenta!, en donde esté la que obtenga la mayor votación.
Caras largas, tristeza, llanto y resignación, en la casa de campaña de la perdidosa.
¡Así es la vida!, título del cartón de Don Yo en el diario La Prensa, en la década de los años sesenta.
jherrerav@live.com.mx