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-La poderosa e inamovible Ministra Yasmín

-Por ética y dignidad profesional, ¡renuncie!

-Clara muestra de corrupción e impunidad

Ráfaga

Mis respetos para la Señora Ministra Yasmín Esquivel Mossa.

Los profesionistas egresados de la Universidad Nacional Autónoma de México no vamos a rasgarnos la camisa frente a la neutralidad del Rector y los grotescos ataques presidenciales contra la Máxima Casa de Estudios y su rector. Habrá que luchar para reivindicar el lema “Por Mi Raza Hablará Mi Espíritu”.

Hoy, 25 de enero, se cumplen 500 años del inicio académico de la Universidad Real y Pontificia de México, reabierta en 1910 como Universidad Nacional de México y a partir de 1929 es la reconocida internacionalmente UNAM.

Guillermo Sheridan Prieto, respetado académico universitario, periodista, literato e investigador, en diciembre pasado puso al descubierto el presunto plagio de la tesis “Inoperancia de los sindicatos en los trabajadores de confianza del Artículo 123 Apartado A”. Trabajo presentado para obtener el título de Licenciado en Derecho.

En 1986, en la Facultad de Derecho, Ciudad Universitaria, la presentó el alumno Edgar Ulises Báez Gutiérrez y la alumna Yasmín Esquivel Mossa lo hizo en la Facultad de Estudios Superiores Aragón, en 1987. Coincidentemente desde la portada hasta la última página, título, índice y texto, eran iguales en un 90 por ciento, se informó luego de la investigación realizada por el Comité de Integridad Académica de la misma FES Aragón.

El escándalo se suscitó porque la licenciada en Derecho Esquivel Mossa , en su calidad de Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, era la candidata del Presidente de México para ocupar la presidencia del Alto Tribunal, a partir del día 2 de este enero.

AYER ANÉDOCTA, HOY TELENOVELA

Cuentan la anécdota registrada en 1961: al abrirse las puertas para que ingresara, como Ministra, la jurista oaxaqueña María Cristina Salmorán de Tamayo, el humorismo de uno de los Ministros afloró al decir “ahora será la Suprema Corte y Confección”. Otro Ministro fue sarcástico, pero su comentario de color subido, me pidieron no reproducirlo.

De acuerdo con otros de mis colaboradores, qué falta hacen Marco Antonio Flota, extraodinario guionista periodístico en la televisión, el columnista satírico Renato Leduc, así como el de los libretos humorísticos Mauricio Kleiff y ni qué decir del cómico carpero Jesús Martínez Rentería, “Palillo”. Todos, ya nos hubiesen deleitado con sus parodias y críticas. Estoy esperando los ingeniosos cartones de mis amigos Pedro Sol y Sergio Iracheta.

Un amigo catedrático, me pidió el anonimato, me expresó que por el desarrollo que ha tenido la denuncia del maestro Sheridan Prieto, el caso de la Ministra Esquivel Mossa ya es una auténtica novela.

Conocido el suceso, inmediatamente la presunta plagiaria puso el grito en el cielo y aseguró que era una mentira, pues ella no plagió ninguna tesis profesional. Su asesora y directora de tesis, la profesora Martha Rodríguez Ortiz se apresuró para respaldarla.

El siguiente capítulo se desarrolló en la ex Sala de la Tesorería de la Federación, en Palacio Nacional, durante el programa televisivo “La Mañanera”. El Presidente de la República entró en defensa de la Ministra. No desmintió la denuncia y la calificó como “un posible error de la joven estudiante”. A Guillermo Sheridan lo tundió de calificativos, entre otros lo llamó alcahuete y “aviador”. En otras de sus “conferencias”, el tabasqueño le siguió atizando duro.

Más materia para el argumento. La profesora Rodríguez Ortiz fue entrevistada por López Dóriga. En sus respuestas doña Martha hace una confesión, muy sana y de buena fe: asesoró y dirigió al pasante Báez Gutiérrez, al mismo tiempo que atendía a la pasante Esquivel Mossa. Trabajó con los dos en 1985. Yasmín aseguró que ella empezó a redactar su tesis en 1985.

Doña Martha dijo que en aquel entonces, cuando no había la tecnología de hoy, ella acostumbraba motivar a sus alumnos prestándoles los trabajos que recibía. Entiendo que eran  los proyectos de tesis. De tal suerte que uno o una podían “copiar”, no plagiar, algunos conceptos. La maestra consideró que eso no implicaba falta alguna.

También nos enteramos que Báez Gutiérrez hizo un manuscrito “confesional”, aceptando haber empleado parte del trabajo de Yasmín, a quien no conocía. Aparece otro personaje, el Notario Público 121 de la Ciudad de México, quien niega haber avalado el dicho del pasante. La asesora y su asesorada dieron valor a ese documento, para reiterar que la hoy Ministra era la plagiada.

La Fiscal Ernestina Godoy Ramos, de la Ciudad de México, en una rápida investigación concluyó que Yasmín no era plagiaria. Es sorprendente que en un caso, extremadamente delicado, bastaron unas horas para exonerar a la presunta plagiaria y revelar otras mentiras. Cierto, el gobierno de hoy, no es igual a los anteriores, ¡es peor!

La parte dramática de la telenovela, en uno de sus muchos ángulos, es la determinación de las autoridades de la Facultad de Estudios Superiores Aragón. Oficializaron el anuncio: se ha rescindido el Contrato de Trabajo Individual de la profesora Rodríguez Ortiz, entre otros puntos por su falta de probidad al confesar que compartía los proyectos de tesis. Nuevamente, tras la entrevista López Dóriga la contactó. El auditorio escuchó:

“Voy a ampararme. Tienen que demostrarme los cargos. No me voy a quedar con los brazos cruzados”. Es fundadora, con cuarenta años de servicios y recién recibió un reconocimiento lo que “me hace que sea una maestra de categoría”. Manifestó que aceptó ir a la entonces Escuela Nacional de Estudios Profesionales Aragón, “porque nadie quería ir, por lo lejos”. La ENEP se convirtió en FES.

SEGUNDO ACTO, CRISPANTE

Mientras en la Suprema Corte de Justicia de la Nación nadie abre la boca, en Palacio Nacional siguen los bandazos contra la UNAM y en particular hacia el doctor Enrique Luis Graue Wiechers, a quien el tabasqueño en sus mañaneras y en cualquier sitio donde se encuentra habla, despectivamente hacia la autoridad de nuestra Máxima Casa de Estudios.

Desde el principio de este asunto el Rector Graue Wiechers se mantiene neutral, débil en su autoridad y presionado políticamente por el inquilino del “modesto departamento” en Palacio Nacional. Inclusive le ha exigido que se deje de politiquerías. Que no se lave las manos como Poncio “Pilatos” (es Pilato). Los insultos presidenciales no cesarán. Por cierto, el tabasqueño volvió a morderse la lengua, porque si sabe hacer politiquería.

El doctor Graue Wiechers el jueves pasado, ante numeroso auditorio de universitarias y universitarios, aceptó que la UNAM está en entredicho y condenó, una vez más, el plagio de una tesis para examen profesional. Sin embargo a nadie satisfizo su discurso, porque no anunció la solución que todos esperaban: anular el título de Esquivel Mossa, desconocer el examen profesional, y, en su caso, denunciar los hechos ante la Fiscalía General de la República.

Habló de que la Comisión de Honor y Justicia del Consejo Universitario analiza las diversas opciones y acciones que puedan aplicarse. Creo que el trabajo realizado en la FES Aragón está completo, objetiva y puntualmente concluido de que hubo plagio. En otra parte de su intervención, el Rector de la UNAM dijo que daría cuenta al Comité Universitario de Ética.

La posición del rector que está por terminar su gestión de 8 años, no es la que maestros y alumnos deseaban. Tal vez las presiones presidenciales, así como la cercanía de la elección del nuevo Rector, pesan demasiado en el ánimo del doctor Graue. No he sabido de manifestaciones de respaldo para él, en estos momentos álgidos.

LA MINISTRA SEGUIRÁ EN LA CORTE

A la abogada Yasmín Esquivel Mossa no la moverán de su sitial. Tiene el respaldo, al cien por ciento, del Presidente de la República.

La esposa del “mejor ingeniero del mundo” José María Riobóo, reiteradamente ha dicho que no renuncia, no pide licencia y no es plagiaria.

Los que dicen saber lo que pasa en la Suprema Corte de Justicia, aseguran que Yasmín es la “Ministra Incómoda”. No tiene mayor conversación con las tres Ministras ni con los 7 Ministros. Yasmín depositó su voto, en la segunda ronda, a favor de la hoy Ministra Presidenta, Norma Lucía Piña Hernández.

De una u otra circunstancia, por ahora no se avizora la salida de la Ministra. Este hecho también deja en entredicho a la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Tan politizado está el asunto que un senador pide juicio político para la ministra Esquivel Mossa. Una agrupación de abogados ya le retiró un reconocimiento. La dirigencia del partido político Movimiento Ciudadano elaboró una Iniciativa de reforma constitucional, a efecto de que anulen el título profesional a la multicitada funcionaria judicial.

Yasmín Esquivel Mossa duerme tranquila. Asiste puntual a su despacho de trabajo. Ya pidió a un grupo de colegas, convocados por un empresario amigo de ella, que aunque sea tantito pero que ya hablen (escriban) bien de ella. La objetiva crónica de ese suceso, de Rafael Cardona, amigo y colega, es de lectura obligada.

Jherrerav@live.com.mx