Gabriel Hernández, un reconocido empresario y miembro del Colectivo 10 de Marzo, dedicado a la búsqueda de personas desaparecidas, fue asesinado a balazos en la colonia Lomas del Real de Jarachina Sur, en Reynosa, Tamaulipas.
Su cuerpo fue encontrado en el asiento del conductor de su camioneta, con aparentes impactos de arma de fuego, luego de que su vehículo cayera en un canal de aguas negras.
Reportes preliminares indican que Hernández fue perseguido por hombres armados, quienes le dispararon en múltiples ocasiones.
La noticia de su fallecimiento, confirmada este jueves, y ha generado indignación entre los miembros del colectivo que dirige Delia Quiroa. El homicidio de Hernández ocurre apenas una semana después de que le fuera retirada la custodia federal que lo protegía, la cual se le quitó sin previo aviso ni explicación.
HISTORIAL DE AMENAZAS Y SECUESTROS
Gabriel Hernández de 53 años, era un defensor de derechos humanos que había hecho públicas las amenazas y secuestros que recibía. Fue víctima de secuestro en cuatro ocasiones. La última vez, el 28 de mayo de 2021, estuvo privado de su libertad durante un mes y fue testigo de operaciones del Cártel del Golfo, específicamente de la célula de Los Metros.
Hernández había acusado directamente a Mario Guitian Rosas, alias «La Chispa», como uno de los cabecillas del Cártel del Golfo responsable de planear secuestros en la zona norte de Tamaulipas.
Debido a estas denuncias y amenazas, un juez federal había ordenado que se le otorgara custodia las 24 horas, los siete días de la semana, desde abril del año pasado.
REACCIONES Y EXIGENCIAS
Delia Quiroa, líder del Colectivo 10 de Marzo, se dijo consternada y lamentó profundamente que las autoridades le hayan retirado la custodia, ya que considera que esta acción facilitó su asesinato.
Quiroa, quien tramitó el amparo para la protección de Hernández, declaró que «cuando una persona se vuelve incómoda para las autoridades pasan estas cosas», y que la obligación de las autoridades es investigar y esclarecer los hechos.
El Colectivo 10 de Marzo expresó su pesar en redes sociales, señalando que «Hay muertes que duelen y más cuando son arrebatadas por manos criminales que antes habían sido denunciadas». El colectivo afirmó que la muerte de Gabriel Hernández sienta un precedente de la «falla sistemática del Estado Mexicano para proteger» a los defensores de derechos humanos, a pesar de las órdenes judiciales.
DIARIO DE MÉXICO