El trabajo en remoto da la oportunidad de esconderse, pasar desapercibido mientras están en una conferencia o impartiendo una clase, como en la película “La Ballena”, los alumnos no conocían a su maestro (se las recomiendo) muchos jóvenes dicen que en la pandemia cuando todas las clases eran en línea, se conectaban, pero no ponían atención, mientras estaban con el celular viendo videos.
En una universidad de prestigio en Guadalajara hicieron investigación al regreso a clases presenciales, descubrieron que los alumnos no retienen la información y pierden fácilmente la atención. Una maestra de matemáticas y física me comentó: “me tardé dos semanas en darles un repaso, no se acordaban de nada de lo que vimos en línea”
En cuanto al trabajo en línea el 79% de los
CEOs (chief executive officer, en español. el Director General) pronostican que en 3 años estará desapareciendo el trabajo en remoto, el “homeoffice”.
En la pandemia parecía que sería lo ideal
estar en casa sin tener que correr en las mañanas, bañarse dejar la ropa de cama y salir veloz al trabajo, pero ya son años de prueba y varias empresas están
revaluando sus políticas y han optado por modelos híbridos o de plano regresar a las oficinas.
Hace unos días me trasladé en un Uber, me
atrapé en la conversación con el conductor, Ingeniero Químico, trabaja para una
empresa alemana con oficinas en varios países del mundo. “Me estresa demasiado estar todo el día pendiente a la pantalla. En la pandemia le decía a mi esposa, te sales un rato de la casa o me salgo yo, ya no aguanto estar en
casa todo el día” Hasta que encontró la manera de evitar “volverse loco” A las 5 de la mañana se convierte en chofer de Uber y a las 9 A.M.
inicia su trabajo. Esas cuatro horas le sirven de relax, conversa con la gente y se siente parte del bullicio de la ciudad.
Los investigadores encontraron varias
causas por lo que no está funcionando como esperaban: Falta de interacción social, Impacto en la salud mental, Merma de la creatividad. Dificultad para generar ideas, la interacción cara a cara fomenta la generación de ideas.
En remoto los mensajes son malinterpretados, crean confusión, retraso en la toma de decisiones y menor colaboración.
La falta de contacto visual y la comunicación
no verbal intensifican las tensiones y dificultan la búsqueda de soluciones.
El impacto en la salud mental es el más
importante de todos por el aislamiento social y soledad. La falta de interacción cara a cara, la ausencia de contacto físico y visual. Se dificultan las relaciones sociales y laborales con los compañeros de escuela, el grupo es una
fuente importante de apoyo social. La sensación de sentirse desconectados de la
organización, alejados de sus amigos, de la familia, además trabajan más horas
que en las oficinas. Resulta difícil establecer el horario de trabajo y el tiempo libre lo que causa el síndrome del “Burnout, el quemado”
En cuanto a la creatividad. El trabajo en
grupo produce lluvia de ideas, innovación y confianza para compartir, crear nuevas soluciones y proyectos.
Las conclusiones. El trabajo híbrido será
la norma, combinar el trabajo en remoto con la presencia en la oficina. Hacer un consenso y regresar a las oficinas. La salud mental es prioridad, las empresas tienen que invertir en el bienestar de los empleados. La Secretaría
del trabajo estará al pendiente por la NOM 035 para prevenir los factores de riesgo psicosocial como: la comunicación, la colaboración, y la inteligencia emocional.
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