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Un grupo de trabajadores de la Clínica Condesa, en la Ciudad de México, reiteró su compromiso con los pacientes y servicios que se ofrecen en este espacio y busca abrir el diálogo con los integrantes…

Un grupo de trabajadores de la Clínica Condesa, en la Ciudad de México, reiteró su compromiso con los pacientes y servicios que se ofrecen en este espacio y busca abrir el diálogo con los integrantes de la sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud que este miércoles les habían impedido la entrada. La directora de la Clínica Especializada Condesa de la Secretaría de Salud, Andrea González Rodríguez, ofreció en conferencia de prensa una disculpa a los usuarios de la clínica, que cada día suman unos mil 500, y que tras los incidentes de la víspera ha disminuido la atención. Destacó la importancia de abrir el diálogo respetuoso con esta sección sindical, así como la presentación de demandas de la organización, pero en el marco de respeto, sin violencia y lejos del hostigamiento a otros trabajadores que trabajan por honorarios u otros esquemas de contratación. Refirió que el conflicto, entre otras demandas de trabajadores de esta sección sindical, es por presuntas violaciones a los derechos de los trabajadores agremiados, así como acusaciones de recibir apoyo de las organizaciones, por mencionar algunos; sin embargo, no existen denuncias formales en este sentido; en su opinión el conflicto es por 18 plazas que aún no ha sido asignadas desde 2018. Así, resaltó la importancia de detener actos de hostigamiento y violencia que afectan la operación de la clínica que impacta en la atención a las personas usuarias, en su mayoría grupos vulnerables y con Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), cada día, en la clínica se detectan unos 15 casos. Destacó que no se tiene pensado hacer denuncias por actos de violencia y decirlo en público con un grupo de trabajadores es un acto de valor, se trata de decir que se manipula a los empleados de honorarios y de base, de personas dedicadas a aspectos específicos de la clínica que buscan un espacio de libertad para desempeñar su trabajo. En compañía de un grupo de trabajadores contratados mediante distintos esquemas de contratación, como Ubaldo Ramos, médico sindicalizado de la clínica desde hace muchos años, refirió que ha visto afectaciones en su trabajo debido a que se le impide realizarlo, “esta situación nos deja desprotegidos, hemos sido violentados”. Explicó que la sección sindical de referencia ocupa una buena parte de la clínica y concentra sus actividades en trabajos políticos y no de atención médica, a su vez, denunció que es común la imposición de no dejar entrar al personal de la clínica y se impide la realización de un trabajo, por lo que se busca la salida del sindicato de la clínica. En tanto, la doctora Diana Molina, que trabaja en este espacio desde hace nueve años con un contrato de interinato, explicó que la clínica es un referente para la atención de personas infectadas con VIH y poblaciones vulnerables y buscan mantener este posicionamiento, por lo que no quieren tratos violentos ni de intimidación. “Como médicos es necesario tener un interés genuino en la atención a este tipo de población y ofrecer un servicio de atención no profesional pone en riesgo la salud en los últimos días se han vivido situaciones de violencia”, expuso. Alejandro Brito representa 15 organizaciones comunitarias y civiles que se reunieron en la clínica para colaborar con las autoridades, esta agrupación manifestó su apoyo a los trabajadores, y en su opinión no dejarlos ingresar a su área de trabajo impacta a los usuarios de la clínica.

FUENTE :NOTIMEX,CANDELERO 28-03-19