“Lo mejor es lo peor que se va a poner”, sin precisar un tema en especial.
¿Lo peor en materia económica?
Jesús Te Ampare
El 26 de febrero de este año, el ex presidente AMLO al iniciar su acostumbrada mañanera, esparció en un tono socarrón:
¿Política?
¿Social?
¿Lo peor en qué?
Nunca lo especificó en público.
Hay que precisar que México, padece una crisis severa en el rubro de seguridad pública; pero también en salud, educación, economía y combate a la corrupción.
La señora Sheinbaum asumió el poder con grandes ilusiones para enderezar lo torcido, y encaminar al país a un mundo globalizado.
Sin embargo, carga sobre sus hombros la truculenta sombra de su mentor que, por fortuna, ya no está en los reflectores políticos.
Tarde o temprano se sacudirá –sin ruptura- ese negativo.
Urge emprender una intensa labor de reconciliación, tendiente a enlazar a todos en la búsqueda del bien común.
Por eso, antes de fallecer, la extraordinaria luchadora social, Ifigenia Martínez, encomendó a Sheinbaum un mensaje irrebatible:
“Dialogar sobre nuestras diferencias y construir, juntas y juntos, un país más justo y solidario”.
Aprender a escuchar es un arte que muy pocos -en especial los arrogantes- dominan y aplican.
Nuestro país requiere de todas las fuerzas políticas para enfrentar los desafíos que la Presidenta debe considerar con urgencia: dialogar con todas esas instituciones si quiere trascender en la historia con más positivos que negativos.
Porque combatir a líderes de oposición o a ministras y ministros, no conduce a nada constructivo.
En una de las giras de la transición, AMLO, clavando la mirada hacia su alumna preferida, aseveró:
“Va a ser muy pronto la mejor Presidenta del mundo”; ojalá que esos buenos deseos se hagan una realidad, porque el compromiso de la científica con los mexicanos, es enorme.
La situación gubernamental es dificultosa, aunque la voluntad política sea eufórica.
ceciliogarciacruz@hotmail.com