Cuatro de los 35 plaguicidas prohibidos por decreto presidencial para la importación, producción, comercialización y el desarrollo de una práctica agrícola más segura, podrían causar diferentes tipos de cáncer, neurotoxicidad, males congénitos, daño al sistema endócrino y envenenamiento de fauna.
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades del gobierno de Estados Unidos (ATSDR, por sus siglas en inglés), Aldicarb, Carbofurán, Endosulfán y DDT, pueden provocar intoxicaciones agudas con síntomas como sudoración, náuseas, vómitos, dolor abdominal, visión borrosa, debilidad, espasmos, pérdida de coordinación y, en exposiciones altas, paro respiratorio.
Estos compuestos químicos, que están en proceso de eliminación en nuestro país, también dejan una huella tóxica en cuerpos de agua y ecosistemas que, a su vez, pueden provocar el envenenamiento de fauna como aves y mamíferos pequeños.
La ATSDR detalla en su página en línea que Aldicarb, insecticida potente, es un compuesto de carbamato altamente tóxico que bloquea la enzima acetilcolinesterasa, que puede causar paro respiratorio y muerte.
Carbofurán, que también es un insecticida, está compuesto de carbamato que provoca efectos agudos neurológicos, motivo por el que se encuentra prohibido en varios países de América y Europa por riesgos a la salud y la fauna.
Endosulfán es un pesticida de aplicación directa a plantas que contiene el compuesto químico organoclorado en altas concentraciones, mismo que es neurotóxico y un fuerte disruptor endocrino, por ello, está ligado a convulsiones y problemas reproductivos.
El DDT, otro insecticida organoclorado, que, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) fue un plaguicida emblemático por su alto uso en la agricultura en el siglo XX, queda prohibido por sus altas concentraciones de este compuesto químico que la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó como probablemente carcinógeno y asociado a daños endocrinos.
La Sader informó esta mañana en la conferencia de la Presidente Claudia Sheinbaum Pardo que estos compuestos eran usados en café, cítricos, caña de azúcar, maíz y algunas frutas de siembra en tierras mexicanas.
Datos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) indican que desde la década pasada y hasta 2023, el gobierno mexicano canceló registros, importaciones y usos de plaguicidas altamente tóxicos.
Así, el uso de Endosulfán fue eliminado de forma progresiva entre 2013 y 2015; la prohibición del uso de DDT se formalizó en 2020; Aldicarb, se vetó de forma total en 2023 y, la importación de Carbofuran, también fue prohibida en 2020.