El primer encierro de toros de lidia de los sanfermines, considerada la fiesta española más internacional, fue muy rápido y también accidentado por las frecuentes caídas de animales y corredores sobre un pavimento mojado por la lluvia de las horas previas.
Según el primer parte médico, no hubo heridos de asta en este primer encierro de los sanfermines, aunque seis participantes fueron trasladados a centros sanitarios por algún corte, contusiones y traumatismos.
Las reses, de la ganadería Fuente Ymbro, cumplieron el recorrido hasta la plaza de toros de Pamplona en menos de dos minutos y medio en el día de San Fermín, con multitud de personas tanto en el recorrido del encierro como en balcones y vallados.
La manada salió puntual desde los corrales de Santo Domingo, espoleada por el sonido del cohete a las 8:00 h local, como es tradición, encabezada por los mansos y cerrada por el único toro colorado, que seguía a los otros cinco, negros bragados.
Los animales enfilaron la cuesta de Santo Domingo agrupados, hasta que tres de ellos cayeron, y dos tardaron en levantarse.
Con la manada estirada, atravesaron veloces la plaza Consistorial, y pasaron de manera limpia la curva de entrada a la famosa calle de Estafeta, la más concurrida.
Las carreras entre los astados eran rápidas, muy tensas en algunos momentos, con caídas de mozos y la manada dividida en dos grupos para romperse definitivamente y entrar en una plaza de toros muy concurrida, donde serán lidiados por la tarde.
Con información de EFE