No me lo van a creer existe un remedio para contrarrestar el agotamiento y la niebla cerebral.
Si hiciera una encuesta seguramente dirían, unas cervezas con los amigos, irme de viaje, comprarme un vestido, un nuevo enamoramiento, un masaje, caminar en la playa, jugar con mis hijos, unas vacaciones, ganarme la lotería, terminar la tesis, un aumento de sueldo, en fin.
Bueno ese antídoto, el remedio se llama creatividad.
Este talento, este don existe, y no está reservado a unos cuantos, a los artistas.
Todos somos creativos de alguna manera;
las investigaciones han demostrado que las actividades creativas pueden mejorar el bienestar y avivar la mente.
Cultivar la creatividad es como un calentamiento antes de alguna actividad deportiva.
Cuando recurrimos a la creatividad el cerebro se vuelve más ágil, más abierto, se despierta la lluvia de ideas, según Bono.
Esto sucede en los grupos que se reúnen a crear y llevar a cabo algún proyecto, las ideas surgen y mejora el estado de ánimo.
No controlar el pensamiento de culpas, memoria del dolor, el resultado es la depresión.
La creatividad es la capacidad de combinar ideas y experiencias de forma original, la facultad de crear, innovar, generar nuevas ideas y conceptos, es llevar a cabo asociaciones entre ideas conocidas para resolver problemas y producir soluciones originales.
No todo está en las teorías, en los libros, la creatividad un proceso dinámico, es una fuerza viva y cambiante del ser humano; es el motor del desarrollo personal y ha sido la base del progreso de toda cultura.
Es un elemento indispensable de todo ser humano, gracias a ese don, producto del hemisferio derecho en los diestros y del hemisferio izquierdo en los zurdos es que ha evolucionado y se ha desarrollado la sociedad, los individuos y las organizaciones.
“Se me prendió el foco” es esa energía que nos mueve a la acción, es intuitiva.
El término ha sido objeto de investigación de diversas áreas desde principios del siglo XX; la Psicología y la Pedagogía fueron las primeras disciplinas en estudiarlo.
Desde esos años se produjo una gran curiosidad por conocer el proceso de producción de ideas y solución de problemas, con una finalidad clara: enseñar a pensar de forma original y práctica.
La creatividad es la capacidad de producir algo nuevo; sin embargo, han surgido algunos desacuerdos debido a los distintos caminos que las investigaciones toman, algunas enfocadas hacia el sujeto, otras hacia el proceso.
Es el conjunto de aptitudes vinculadas a la personalidad del ser humano que le permiten, a partir de una información, mediante una serie de procesos internos cognitivos en los cuales se transforma dicha información, la solución de problemas con originalidad.
Sin lugar a duda, el diseño y la innovación de productos constituyen una de las áreas más interesantes en la aplicación del proceso creativo.
Desde la escuela primaria en una escuela católica, me surgían ideas, algunas eran incómodas para el sistema, pero recuerdo otras que de adulta me sorprendí tanto que hasta las publiqué en uno de mis libros. También me sucede en la consulta con los pacientes, mientras los escucho, siento la empatía y yo misma me sorprendo de las soluciones.
Son varios los obstáculos de la creatividad: la educación escolar, la conservadora, la tradicional, en lugar de fomentarla la atrofian, el hecho de unificarlos de que todos piensen igual repitan las teorías al pie de la letra y dedicarles la mayor importancia a las matemáticas.
En la milicia, la religión, se trata de obedecer y repetir modelos, cuando preguntan responden que es dogma de fe.
Los estudios que tienen que ver con números: Contaduría, las Matemáticas, tienen más lógica que creatividad.
Los padres autoritarios no permiten que los hijos piensen, el más creativo el diferente se convierte en el chivo expiatorio, se le etiqueta, se castiga.
Otro obstáculo de la vida moderna; la adicción al celular, los cerebros están revolucionados como un carro de carreras sin frenos.
Los videos que no dejan ni pensar cuando aparece otro y otro.
Por supuesto que hay videos educativos, tutoriales, cuando se busca resolver algo no cuando el aparato toma el control y elige lo que quieren que veas.
La adversidad, las crisis, el hambre tienen el don de despertar la creatividad, esos que en la prosperidad permanecen dormidos.
Lo que hacen los gobiernos, a base de repetir frases, castigos y premios, es que los ciudadanos no piensen, se dejen llevar para atraparlos en sus redes de clientela y con eso se incrementa su poder, sin darse cuenta ya tomaron “todo” el poder, hasta de reelegirse y un país libre volverlo dictadura.
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