La inflación interanual se aceleró en octubre luego de haber registrado dos meses a la baja, impulsada sobre todo por los precios de productos agropecuarios, los cuales volvieron a tomar fuerza, así como por el alza estacional en las tarifas eléctricas.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor reportó un aumento mensual de 0.55%, la cifra más alta para un mes de octubre desde 2022, con lo que la inflación anual llegó a 4.76%, informó el Inegi.
Los precios de productos agropecuarios se incrementaron 10.9% anual, impactados por frutas y verduras, con subida de 15.9%, retomando su tendencia alcista interrumpida en agosto y septiembre pasados.
“En el primer semestre del año los precios de los productos del campo estuvieron afectados principalmente con sequías y altas temperaturas; sin embargo, en los últimos meses los precios de este rubro han aumentado por las lluvias intensas y tormentas tropicales”, explicó Janneth Quiroz, directora de análisis económico, cambiario y bursátil de Monex.
Entre junio y octubre se registró la precipitación promedio más alta para ese periodo en los últimos siete años, agregó.
Los productos agropecuarios que reportaron las mayores alzas anuales en octubre fueron la papaya, con 48.5%; nopales, 47.7%; calabacita, 44.3%; pepino, 41.6%; chayote, 31.5%; ejotes, 31.4%; tomate verde, 30.7%; jitomate, 23.8%; uva, 16.8%, y huevo, 15.9%.
“Con la expectativa de más tormentas en lo que queda del año, en conjunto con la llegada del invierno, que probablemente estará acompañado por el fenómeno de La Niña, el panorama para el sector agropecuario se mantiene retador”, dijeron analistas de Banorte.
La buena noticia fue que la inflación subyacente, que incluye los bienes y servicios cuyos precios son menos volátiles, reportó un aumento anual de 3.8% en octubre, acumulando 21 meses de disminuciones y llegando a su menor tasa desde diciembre de 2020.
A su interior, las mercancías volvieron a moderar su marcha con un incremento anual de 2.81%, su menor ritmo desde noviembre de 2015, probablemente reflejando menores presiones de demanda y a pesar de la depreciación cambiaria de los últimos meses, si bien esta suele reflejarse con rezago, explicó Alejandro Saldaña, economista en jefe de grupo financiero Ve por Más.
Los precios en los servicios cedieron un poco, con lo que su variación anual se ubicó ligeramente por debajo de 5% por primera vez desde junio de 2022.
Si bien se encuentra muy por debajo del pico de septiembre de 2022, la inflación ha dejado de presentar una clara tendencia a la baja este año. Asimismo, todavía enfrenta un panorama incierto y la volatilidad financiera puede tardar en disiparse, advirtió Saldaña.
Analistas de CitiBanamex reconocen ciertos riesgos, sobre todo derivados de un entorno externo incierto, con la victoria de Donald Trump induciendo una mayor volatilidad de los activos financieros locales y mejores resultados a los estimados del PIB en el tercer trimestre del año, apuntando a que la actividad económica es más resiliente, factores que podrían limitar la futura disminución de la inflación.