Minutos antes de la hora indicada un par de ojos expectantes con estrellas por pupilas, distintivo del dúo francés AIR, daban la bienvenida a los fanáticos que llegaban al Auditorio Nacional, mientras una atmósfera sonora se escurría por todo el recinto de Reforma, convirtiéndola en una especie de plataforma de lanzamiento a lo que sería un viaje sideral.
Alrededor de las 21:00 horas Jean-Benoît Dunckel y Nicolas Godin, capitanes de está inmensa nave espacial salieron al escenario ante los aplausos y vítores de los 8 mil 500 fanáticos que reunieron los franceses, algunos provenientes desde sus inicios hace más de treinta años, otros tantos fanáticos desde hace poco que los experimentaron en el Festival Hipnosis.
El dúo esta vez en formato de trío para la gira con el baterista Louis Delorme, salieron lanzado besos y saludos sencillos a su público cuando fueron enmarcados por un recuadro blanco siguiendo la esencia del dúo en ‘The white box stage’ que han traído en algunas parte de la gira “Air play Moon Safari”. celebrando 25 años de su icónico álbum debut.
En este ocasión solo fue la pantalla al fondo la que jugó con el concepto de la caja, sin embargo está marco se transformaba como avanzaba la noche jugando con las mismas luces del escenario, así lo demostraban al interpretar “La femme d’argent” y “Sexy boy”, las primeras piezas.
“Gracias, como están, somos Air”, dijo Dunckel antes de interpretar “All I need”, ante los gritos emocionados pero tranquilos de los miles de tripulantes de este viaje cósmico.
“Kelly, watch the stars” animó a los pasajeros con su ritmo envolvente y voces futuristas que invitaban a asomarse por la ventanilla y apreciar el cosmos, o a explorar el subconsciente personal. “Talismán” describía algún tipo de tensión de esta misión pero “Remember” volvía a colocar a los tripulantes ante la magnificencia de la galaxia. Lo cual sentían los espectadores que se mostraban contentos y un tanto atónitos de lo que presenciaban.
En “You make it easy” los franceses bajaron aún más las revoluciones haciendo parecer el concierto como si fuera un sueño solamente, pero como todo sueños los cambios inesperados siguieron pasando ahora con “Ce matin là” sentenciando que su disco debut “Moon safari” sería interpretado por completo, como debía de ser para celebrar su 25 aniversario, el cual terminaría con “New star in the sky” y “Le voyage de Pénélope”.
Luego de este viaje sonoro por los confines del universo AIR se tomó un breve descanso a manera de intermedio, aunque está primera parte fue totalmente onírica el dúo francés no podía dejar a la deriva del vacío del espacio a los espectadores por lo que continuaron con éxitos de toda su trayectoria con piezas como “Radian” y “Venus” con las que continuaron con esta ensoñación cósmica ante un público entusiasmado embelesado por la música de los franceses.
El downtempo y el space age pop, subgéneros musicales que este dúo francés maneja con maestría estuvieron presentes en todo el concierto que cabe mencionar no tuvo pantallas extras, salvó la de fondo que más que mostrar visuales, enfocando la atención al centro del escenario y basándose en una plantilla de colores, eso sí AIR jugó con todas las luces del Coloso de Reforma, convirtiendo ese viaje espacial en una odisea inmersiva.
“Cherry Blossom Girl”, “Run”, “Highschool Lover”, “Dirty Trip”, “Don’t Be Light”, “Alone in Kyoto” y “Electronic performers” terminaron la onírica velada, que sin ser convencionalmente espectacular el dúo francés sabe cómo imponer en el gusto del público con sus paisajes sonoros envolventes. “Moon Safari” no es un disco para las pistas de baile, es un hecho, sino para un viaje a el cosmos interno.
Con información de El Universal Online