Si bien se anticipa que las economías regionales sigan expandiéndose, enfrentarán un entorno interno y externo complejo e incierto por la inseguridad, los efectos de la reforma judicial y la menor inversión pública por la reducción del déficit fiscal, así como por las políticas comerciales y migratorias que estaría adoptando Estados Unidos, advirtió el Banco de México (Banxico).
Bajo ese entorno enfrentarán desafíos para su crecimiento, aunque su ritmo de crecimiento podría ser moderado, consideró, al mencionar también la preocupación por el impacto de los eventos climatológicos.
En las expectativas que presentó en el Reporte Trimestral de sobre las Economía Regionales, no se menciona el nombre del próximo presidente de EU, Donald Trump, pero se pone de relieve que existe incertidumbre sobre el tipo de políticas que estaría adoptando ese país en distintos ámbitos como comercio internacional y migración.
Ponderó que en función de cómo se presenten estos factores, no solo aquellas entidades más vinculadas con el mercado internacional, especialmente en el norte y las regiones centrales, o aquellas que históricamente han sido emisoras de migrantes, particularmente en las regiones centrales y el sur, podrían registrar fluctuaciones en su actividad.
También, apuntó, el resto de las entidades del país debido a los efectos indirectos que los choques externos referidos podrían generar debido a las relaciones económicas interestatales.
Directivos consultados por Banxico en la región centro-norte del sector de la construcción, reportaron que el mercado de vivienda se ha visto afectado por factores externos.
Señalaron como ejemplos: la incertidumbre generada por el proceso electoral en Estados Unidos, y la posibilidad de cambios en la relación comercial entre México y ese país.
Lo anterior implicó la postergación de inversiones inmobiliarias en Jalisco y Baja California Sur, principalmente en zonas turísticas, por parte de desarrolladores nacionales y extranjeros.
Indicaron que el mercado de vivienda residencial turística mostró signos de desaceleración, especialmente en Los Cabos.
Piensan que actualmente ese mercado enfrenta la postergación en las decisiones de compra por parte de residentes foráneos, ante el entorno de incertidumbre que prevalece.
Hicieron notar la menor inversión pública en la región, ante la reducción de fondos para algunos proyectos de infraestructura, con lo vual se postergaron proyectos.
Con información de El Universal Online