Jesús Te AmpareClaudia Sheinbaum, como aspirante presidencial, fue siempre la predilecta del régimen.
Se comprometió a prolongar la estrategia de la 4T, y a evitar posibles cambios en el programa de gobierno.
Por ello, recibió un apoyo privilegiado en el juego político sucesorio.
Paso a paso, conquistó el afecto, confianza y lealtad del presidente AMLO.
Admitirá un país con graves conflictos políticos, económicos, sociales y diplomáticos, entre otros rubros.
Tan es así que en el extranjero nos consideran –de manera despectiva—como una república bananera (tercer mundo). O sea, plagada de inestabilidad política, corrupción e ilegalidad en la vida cotidiana.
Las organizaciones criminales se han apropiado de varios Estados de la República.
Violencia e inseguridad pululan por doquier.
Se asoma, la probable mano firme de una científica.
El reconocido periodista Abraham Mohamed (amigo-hermano) se aventuró al afirmar que la doctora Claudia Sheinbaum no solo respeta y admira a su progenitor político, sino que lo idolatra (amor excesivo y vehemente).
En efecto, “lo que se ve no se juzga”, reza un refrán popular.
MÁSCARA SONRIENTE
Don Daniel Cosío Villegas (historiador, sociólogo, politólogo, escritor, diplomático y académico mexicano) sostenía que «los psicólogos nos han advertido que tras una máscara sonriente, puede parapetarse un ánimo colérico y vengativo”.
Un político debe tener carisma y emitir mensajes emotivos. Las masas populares están saturadas de farsantes que solo anhelan poder para enriquecerse.
Además, un político debe despertar entusiasmo en la ciudadanía apática y cansada de escuchar las promesas de siempre, que se reflejan en una ausencia notable de sufragios en las urnas.
El escritor español José Martínez Ruiz (contemporáneo de Valle-Inclán, Baroja y Unamuno), más conocido como AZORÍN, redactó un libro llamado “El político” que contiene sabias recomendaciones, consejos y advertencias para quienes aspiran a ser servidores públicos.
Para AZORÍN, el político “no debe prodigarse ni en la calle ni en los paseos ni en los espectáculos públicos. Debe vivir recogido (porque) lo que mucho se ve, se estima poco.
«Debe ser una persona con quien podamos comunicarnos”.
“Tendrá nuestra estimación, nuestro respeto, pero le faltará el matiz de severidad, ese algo que impone, ese aspecto que ansiemos verla, hablar con ella y oir de sus labios tales o cuales opiniones”, propone el escritor.
“Sepa conservarse en el fiel de la balanza. No pierda nunca el sentido del equilibrio. En el arte del gobierno, el equilibrio consiste en ser entero o condescendiente, según los casos.
No estime un elogio en más de lo que realmente vale. No perder nunca la sangre fría, ser sencillo y natural”.
Estas son algunas sugerencias de AZORÍN para quienes aspiran a ser políticos y servir a su país.
Para AMLO los colaboradores ideales son aquellos que tienen 90% de honestidad y 10% de experiencia.
Hoy concluye su mandato con vítores de la Corte de vasallos y ofensas de adversarios “desinflados”.
No se irá a su finca; porque tiene que”aclimatarse”.
Por su parte, Claudia Sheinbaum tomará posesión mañana 1 de octubre como la primer mujer Presidenta ante el Congreso de la Unión.
Como dice el amigo-colega Ciro Gómez Leyva:
¡Ánimo!
ceciliogarciacruz@hotmail.com