x.- ¿Sabe quién fue Rafael Alducin?…
x.- Buenas y Malas en el Deporte
Por: Jorge Herrera Valenzuela
jherrerav@live.com.mx
ALFA OMEGA
Poco sabemos sobre la personalidad de un talentoso hombre que destacó como jurista, brilló en el campo diplomático, extraodinario en la tribuna parlamentaria, combativo articulista y reconocido literato. Rechazó homenajes y en vida no aceptó la invitación presidencial para que fuese sepultado en la entonces Rotonda de los Hombres Ilustres, “porque con el tiempo (la Rotonda) va a parecer fosa común”.
Ese mexicano precursor de la legislación agraria, que fue exiliado a Centroamérica, que se enfrentó en la Cámara de Diputados al tremendo “Quadrilátero”, implacable maderista y carrancista, fue don Luis Vicente Cabrera Lobato, conocido en las páginas de la Historia Patria como Luis Cabrera, nacido en 1876 en Zacatlán, Puebla, no ocultó nunca ser antiobregonista, furibundo crítico del callismo y nada simpatizante del cardenismo.
Como político, abogado y parlamentario, empleó siempre su nombre, Luis Cabrera. A partir del 26 de mayo de 1920 en las páginas del diario Excélsior, es el articulista que firmó como Lic. Blas Urrea y su obra literaria la hizo bajo el nombre de Lucas Ribera. Los artículos formaron parte del libro titulado “La herencia de Carranza”, donde exaltó la figura del Barón de Cuatro Ciénegas, lo que molestó a Adolfo de la Huerta y a Álvaro Obregón, quienes iniciaban la era del caciquismo político sonorense, que culminaría cuando es expulsado del país Plutarco Elías Calles.
Como diputado de la XXVI Legislatura, Cabrera sostuvo su postura revolucionaria y en la tribuna hubo de enfrentarse a los diputados reaccionarios y conservadores, del Quadrilátero: José María Lozano, Francisco M. Olaguibel, Nemesio García Naranjo y Querido Moheno, siendo éste último que al terminar su intervención, en una sesión, dirigiéndose a sus compañeros expresó: “como dicen, mono, perico y poblano, no lo toques con la mano, tócalo con un palito, que es un animal maldito”, aludiendo directamente a su opositor.
Cabrera volvió a la tribuna para tratar otros temas y no olvidó la ofensa de Moheno y concluyó respondiendo: “cuatro platillos come un poblano: cerdo, cochino, puerco y marrano”. Se cuenta que esa sarcástica e hiriente contestación, dicha por un extraodinario orador parlamentario, provocó un sonado escándalo y enfureció a los integrantes del Quadrilátero.
Son muchas las anécdotas en la vida de este hombre, a quien se debe el inicio de la lucha agrarista en la etapa de la Revolución Mexicana, pues el 3 de diciembre de 1912 en la Cámara de Diputados pronunció el discurso que adoctrinó al movimiento zapatista y fue relevante cuando los Constituyentes del 17 redactaron el Artículo 27. Luis Cabrera jamás dio un paso atrás, no se doblegó ante nadie y soportó el exilio a Centroamérica, bajo el cargo de haber participado en un atentado al presidente Pascual Ortiz Rubio. La maniobra fue obra de Plutarco Elías Calles.
Cierta ocasión en Nueva York se da un encuentro, en 1928, entre el licenciado Luis Cabrera y el general norteamericano John J. Pershing. Se conocieron 12 años antes cuando el mexicano intervino ante el General para que sacara las tropas que incursionaba en nuestro territorio, buscando a Pancho Villa. Al verse nuevamente, Pershing expresó: “Míster Cabrera, nunca lo voy a olvidar por algo que nos dijo. Usted se mantuvo firme en que las tropas tenían que salir y en que los otros asuntos ya los pensaría. Nos impacientamos y le dije ese es el problema con ustedes, mexicanos, que siempre están pensando, pero no actúan”. Usted me respondió: “No General Pershing, el problema es con ustedes americanos, que siempre actúan, pero nunca piensan”.
Finalmente comentaré que cuando el presidente Elías Calles requería quien le redactara unas notas diplomáticas, para responder a la presión norteamericana por la Ley Petrolera de 1927, se vio obligado a llamar a su combativo crítico, Luis Cabrera. El poblano cumplió los deseos del sonorense, la vía diplomática acertó en su planteamiento. Cuando Plutarco Elías Calles le preguntó por el monto de sus honorarios, la respuesta fue contundente: “Por servir a la Patria, no se cobra”.
Las referencias históricas las tomé de la semblanza que escribió Luis Cabrera Cuarón, nieto del personaje que formó parte del grupo de 8 distinguidos mexicanos fundadores del Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, el 30 de junio de 1953, apoyados por el presidente Adolfo Ruiz Cortines y encabezados por el maestro Salvador Azuela Rivera.
VENDÍA LLANTAS, FUNDÓ EXCÉLSIOR
¿Puede usted imaginarse que de vendedora de llantas, una persona entre a la historia por ser fundadora de un diario, en 1917?
Pues sí se dio el caso, y esa persona fue Rafael Alducin Bedoya que en su juventud fue empleado oficinista, comerciante y organizador de carreras de autos junto con su amigo Julio Limantour. Sus visitas frecuentes al diario El Imparcial, fundado y dirigido por Rafael Reyes Espíndola, le despertó interés para ingresar a las filas del periodismo, como empresario, y el 18 de marzo de 1917 aparece el primer ejemplar de Excélsior, El Periódico de la Vida Nacional, dirigido por el joven poblano.
El también fundador de Revista de Revistas y de Jueves de Excélsior entrevistó al dictador Benito Mussolini, líder del Partido Nacional Fascista y proclamado Duce de la República Social Italiana, allá por 1922. Por ese tiempo también habló con el Papa Pío XI. Alducin, originario de San Andrés Chalchicomula, Puebla, con el apoyo del secretario de Educación Pública, José Vasconcelos, es el autor del Día de las Madres, que los mexicanos celebramos el 10 de mayo.
En abril de 1924 se cayó de un caballo y murió a consecuencia de las lesiones sufridas, a la edad de 35 años. Su viuda Consuelo Tholmalen tomó las riendas de la empresa periodística y se convirtió en la primera directora de un diario mexicano en el Siglo XX. Al paso de los años Excélsior tuvo grandes reporteros y dos excelentes ejecutivos, Rodrigo de Llano y Gilberto Figueroa. En el gremio se considera que la época de oro del diario, fue la del gran amigo, compañero y “hermanito”, como él me decía, Don Julio Scherer García.
ADIÓS A “EL NENE”, GRAN CARICATURISTA
La tarde noche del sábado 19 del pasado julio, víctima de una enfermedad renal, falleció uno de los muchos grandes caricaturistas mexicanos: Eduardo Gómez Sánchez, a quien cariñosa y familiarmente llamábamos “El Nene”, cuya juventud la vivió en el puerto de Tampico. Estudió Artes Gráficas en la Universidad de las Américas. Pude convivir muchas veces con él en lo personal y en el grupo de extraodinarios amigos cartonistas. Guardo dos recuerdos, uno cuando en la casa de Miguel Osorio Marbán y su esposa Laurita, el gremio de los caricaturistas compartió una comida con Luis Donaldo Colosio Murrieta, presidente nacional del PRI.
En julio de 1989 los caricaturistas del diarismo mexicano montaron una exposición en la Casa de Vacas, en Madrid, España. Ahí compartí con otros grandes amigos: Pedro Sol, Luis Carreño, Castrux, Osvaldo y Marino Sagastégui, Raúl Moysén, entre otros. Participamos en diversos eventos y la última vez fue en la casona de Xicoténcatl, antigua sede del Senado de la República, donde Eduardo recibió la presea José Guadalupe Posadas, en reconocimiento a su larga trayectoria profesional.
“El Nene” se fue, en la fecha señalada, cuando se publicó su última caricatura en El Sol de México y en varios Soles de la Organización Editorial Mexicana. La huella de su trabajo está en los diarios El Universal, Novedades, Últimas Noticias (diario de mediodía), Excélsior y lo recuerdo en aquella revista de los años cincuenta: Já Já. Intervino en programas de televisión, como Trizas y Trazos, en Canal 11, y en Telesistema Mexicano (Televisa) con Encarnita Sánchez y el inolvidable Paco Malgesto. Para doña Elvia Herrera, sus hijos Renato y Siomi y nietos del gran humorista, nuestro sincero pésame.
Como dice Pedro Sol y me uno a él: “Me tomaré a su salud una copa de tequila Siete Leguas que tanto le gustaba”.
BUENAS Y MALAS DEL DEPORTE
Los jóvenes deportistas mexicanos que están participando en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 lograron triunfos y acumulan medallas de oro, de plata y de bronce, en la Ciudad de México el gobierno de López Obrador asesta “Otro Golpe Bajo. Cierra Gobierno Federal laboratorio de antidopaje en política de austeridad; además recortan los servicios en el CDOM”, según se publicó el jueves pasado en Cancha, la Sección Deportiva de Reforma. “Falla Moctezuma (Esteban Moctezuma Barragán titular de la SEP) y cierra el CDOM”.
La versión periodística añade que “Tiran a la basura inversión millonaria en ese Centro que operaba certificado desde 2013”. Según un funcionario de la CONADE (Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte) el Laboratorio de Control y Prevención del Dopaje, “es un gasto oneroso”. Mientras tanto el licenciado Carlos Padilla Becerra, presidente del Comité Olímpico Mexicano desde Lima, Perú, manifestó: “Es lamentable si esto sucede (el cierre del Laboratorio) porque nuestros atletas quedan muy desprotegidos. México tendrá que estar a expensa de los exámenes en otros países y lo más lamentable es que se cierre por falta de recursos”.
P.D. Un breve mensaje a la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, doctora Claudia Sheinbaum Pardo: es necesario que se disponga lo conducente, en vías de protección para cientos de familias, ante la serie de “microsismos” registrada, a partir del sábado 13 de julio, en la Alcaldía Álvaro Obregón, de acuerdo con los informes del Servicio Sismológico Nacional. No se trata de causar alarma, pero sí de tomar las medidas necesarias, toda vez que nadie puede pronosticar un sismo, ni la magnitud del mismo.