El canciller Juan Ramón de la Fuente afirmó que se vive una oportunidad histórica para revitalizar el diálogo político y fortalecer la cooperación internacional.
El llamado lo hizo durante la IV Reunión Ministerial del Foro China-Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada en Beijing.
📸 En Beijing, el canciller Juan Ramón de la Fuente participó en la IV Reunión Ministerial del Foro China-CELAC en representación de México.
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) May 13, 2025
El titular de la @SRE_mx hizo un llamado a fortalecer el diálogo para dirimir las diferencias y reiteró el mensaje de coordinación y… pic.twitter.com/FE2mbYBr9F
Durante su participación, el secretario de Relaciones Exteriores subrayó la premisa del Gobierno de México: una región más unida es una región capaz de articular soluciones compartidas y de hacerle frente a los distintos escenarios geopolíticos globales.
De la Fuente Ramírez calificó como urgente hacer un ejercicio crítico y relanzar un proceso de reformas que preserven el papel fundamental de la Organización de las Naciones Unidas, para debatir y dar legitimidad a las decisiones colectivas de la comunidad internacional.
Son tiempos para fortalecer el multilateralismo con acciones que, si hoy son decididas, mañana serán decisivas para avanzar hacia ese futuro que anhelamos”, resaltó.
Reiteró las palabras de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre que es tiempo de unidad, colaboración y coordinación, pero no de subordinación.
Dio así la bienvenida a iniciativas orientadas a la apertura y la construcción de puentes entre países, así como a los proyectos encaminados a complementar los esfuerzos nacionales, regionales y multilaterales en materia de cooperación y desarrollo.
“Durante la última cumbre de la Celac, celebrada en Tegucigalpa, la presidenta Claudia Sheinbaum propuso la celebración de una Cumbre por el Bienestar Económico de América Latina y el Caribe. Agradecemos a los países de la región el haber acogido esta propuesta”, señaló.
El canciller concluyó su participación afirmando que la paz y la seguridad internacionales, la respuesta efectiva a las múltiples crisis ambientales y sanitarias, así como la erradicación de la pobreza y las desigualdades, entre otros desafíos, dependen de un sistema internacional sólido, sustentado en la confianza mutua y en el respeto irrestricto a las reglas del derecho internacional.
Con información de López-Dóriga Digital