Países de América Latina y el Caribe acordaron este viernes medidas para coordinar y garantizar el abastecimiento de alimentos suficientes, inocuos y con adecuado valor nutricional durante la emergencia sanitaria de coronavirus (COVID-19) que acecha a la región y al mundo entero.
La declaración difundida por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) fue firmada hoy por los ministros y secretarios de agricultura, ganadería, pesca, alimentación y desarrollo rural de 25 países latinoamericanos y caribeños.
La finalidad es beneficiar a los 620 millones de habitantes de la región con medidas que garantizan que, a pesar de las medidas para combatir la pandemia, el sistema alimentario mantendrá su funcionamiento regular, no habrá escasez y la industria seguirá su curso.
La declaración conjunta expresa que todos los sectores de la industria alimentaria seguirán trabajando durante toda la emergencia, desde la agroindustria hasta el transporte, los mercados y las empresas importadoras y exportadoras.
“Dieciocho millones de agricultores, pescadores, ganaderos y acuicultores, hombres y mujeres, siguen trabajando día a día en nuestra región, para que los alimentos no falten en nuestras mesas”, destacó la FAO y añadió que el sistema alimentario ha funcionado a buen nivel a pesar de la crisis.
La FAO también recalcó que la oferta de alimentos se ha mantenido estable en todo el mundo, a diferencia de lo ocurrido en emergencias previas. De esta forma, hizo un llamado a las empresas para no modificar los precios internacionales de los alimentos si no está justificado.
Con la finalidad de evitar una situación crítica en caso de que la pandemia se convierta en un problema global a largo plazo, los países acordaron medidas acordes a las necesidades y realidades de cada país.
Entre las principales decisiones del acuerdo regional se encuentran: proveer de asistencia técnica y financiera a pequeños y medianos productores de las distintas actividades económicas, asegurar el funcionamiento de los mercados al garantizar su liquidez e implementar programas de emergencia para prevenir pérdidas y desperdicio de alimentos.
También se definieron como compromisos regionales el monitorear las cadenas logísticas que incluyen dos o más países; fomentar el uso de plataformas de comercio electrónico de alimentos, así como promover políticas fiscales y comerciales para atender la crisis y mitigar su impacto en la industria alimentaria.
FUENTE ; NOTIMEX , CANDELERO 03-04-2020